El disco de desbaste para amoladora constituye una herramienta abrasiva diseñada para aplanar diferentes irregularidades en superficies generalmente metálicas, como cordones de soldadura por ejemplo.
En particular, el disco de desbaste para amoladora se fabrica con un espesor que ronda entre los 4 y los 8 mm. Según su forma, existen discos de desbaste con el centro deprimido y también de tipo “flaps”, cuyas múltiples telas abrasivas se posicionan en forma radial para lograr acabados más suaves.
La elección de un disco de desbaste para amoladora varía según el material de la superficie sobre la que se desee trabajar. Por ejemplo, en caso de realizarse trabajos de desbaste sobre superficies ferrosas, acero al carbono, acero inoxidable o fundición, lo mejor es utilizar discos de desbaste cóncavos o de copa. Debe tenerse en cuenta, además, que el grano del disco deberá ser de óxido de aluminio con aglutinante de resina.
Por otra parte, siempre que se trabaje en el desbaste de metales como el cobre, zinc, latón, estaño, plomo o titanio, es muy aconsejable usar discos abrasivos de dióxido de circonio. Aunque estos discos también responden muy bien en madera, lo ideal para trabajar en esta última es emplear los discos flaps.
Finalmente, para los procesos de desbaste en hormigón y ladrillo suelen usarse los discos de silicio con aglutinante de resina. El disco abrasivo de copa puede emplearse en ambos procesos, aunque en el primero, además, se pueden utilizar discos rectos y cóncavos.
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