Para trabajar en forma segura, se debe cubrir todos los potenciales riesgos a los que el trabajador pueda estar expuesto, para lo cual se utilizan los elementos de protección personal. Es necesario contar con una protección respiratoria en el trabajo a corde a las tareas que el trabajador deba realizar, ya sea por manipulación de elementos quimicos o polvo en el ambiente.
La primera cumple con la función de reducir el ingreso en el sistema respiratorio de gases, químicos, polvos, vapores o de cualquier otro contaminante que pueda estar presente en el lugar de trabajo.
Se utilizan diversos tipos de protección respiratoria en el trabajo, que el empleador debe seleccionar cuidadosamente, teniendo en cuenta qué sustancia se necesita bloquear, en qué cantidad está presente en el aire, cuál es el nivel de protección que se requiere, qué tipo de tarea se realizará y cómo es el entorno de trabajo.
Los equipos filtrantes, como el nombre lo indica, trabajan con un filtro que retiene los contaminantes y que purifica el aire, minimizando la contaminación que se respira.
La protección respiratoria aislante bloquea el ingreso del aire del entorno (por lo cual se utiliza, en especial, en medios de alta contaminación) y suministra oxígeno al usuario.
En muchos casos, la protección respiratoria en el trabajo se combina en una máscara que la integra con la protección facial, la protección ocular y/o con la protección auditiva, ofreciendo una prestación completa.
Para evitar daños o un funcionamiento poco eficaz, se recomienda no utilizar este tipo de equipos de protección personal durante un tiempo prolongado, comprobar sus fechas de vencimiento, comprobar el estado de los filtros y desecharlos cuando sea necesario.
Última Actualización: 22/05/2019 13:41